Me quedé pensando en las diferencias entre lo porno y lo erótico. Y en los cuatro o cinco sonetos de amor y de sexo que escribí en este blog. ¿Quisieron ser porno o quisieron ser eróticos? No sé. Yo los escribí con la idea fija: no sonar como Arjona. En realidad, desde un comienzo, los escribí buscando emular a Ramón Paz, lo cual es imposible (porque como Ramón no hay dos). Encaré el desafío como un mero juego de principiante. Y en el camino, imaginé guiños a Borges y a Neruda ("me gusta que me cojas y me hables" iba a llamarse en un principio "no me gustas cuando callas"). Y la verdad, más allá de si me salió o no algo parecido a lo de Ramón, o algo medianamente bueno, o algo finalmente arjonesco mal que me pese, me divertí muchísimo haciéndolo (que de gozar en la vida se trata). Por otro lado, pienso que aunque me tome la cosa seriamente, busque la réplica fiel y me esfuerce mucho, mucho, mucho, siempre lo mío va a sonar distinto a lo de él ya que, detrás de todo (pornosoneto de este blog) sólo hay... una mujer.
En fin, no los quiero aburrir autoanalizando mi (por ahora) breve vida como pornosonetista. La intención de este post era compartir un viejo y querido poema de Oliverio Girondo:
Se miran, se presienten, se desean,
se acarician, se besan, se desnudan,
se respiran, se acuestan, se olfatean,
se penetran, se chupan, se demudan,
se adormecen, se despiertan, se iluminan,
se codician, se palpan, se fascinan,
se mastican, se gustan, se babean,
se confunden, se acoplan, se disgregan,
se aletargan, fallecen, se reintegran,
se distienden, se enarcan, se menean,
se retuercen, se estiran, se caldean,
se estrangulan, se aprietan, se estremecen,
se tantean, se juntan, desfallecen,
se repelen, se enervan, se apetecen,
se acometen, se enlazan, se entrechocan,
se agazapan, se apresan, se dislocan,
se perforan, se incrustan, se acribillan,
se remachan, se injertan, se atornillan,
se desmayan, reviven, resplandecen,
se contemplan, se inflaman, se enloquecen,
se derriten, se sueldan, se calcinan,
se desgarran, se muerden, se asesinan,
resucitan, se buscan, se refriegan,
se rehuyen, se evaden, y se entregan.
4 comentarios:
no me gustas cuando callas
cuando callas los versos presentidos
los versos presentidos y callados
sentidos y callados se atragantan
callados se atragantan en la mente
en la mente de la pobre poetisa
pobre, pobre petisa, que no llega
no llega al estante más de arriba
más de arriba, más allá de la heladera
la heladera que no prende, que no puede
que no puede enfriarle desatinos
destinos de rimas que se funden
se confunden con ramas y destinos.
Buenísimo Marcos!!!
Detrás de todo sólo hay una mujer
Detrás de todo sólo hay una mujer
Ni una diva total
Ni una mujer fatal
Soy Susana, soy siempre igual
¡Hola Susana!
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